DIA 4:
Nos levantamos temprano y nos preparamos unos sandwichs para así ir más tranquilos con la comida a cuestas, y listos ya para empezar la ruta!
Ese día fuimos a ver Moissac que está un poco más lejos y es famoso por su claustro y su fachada que son Patrimonio de la Humanidad.
Tuvimos que ir como hacia Cahors, hasta ahí el paisaje era precioso pero luego cambio bastante y ya no era tan bucólico, aunque también era curioso.
Llegamos a Moissac sobre las 11.30h. La primera impresión del Monasterio no fue muy buena, es como si estuviese mal hecho, una parte de ladrillo y otra de piedra.
La fachada no es gran cosa y el pórtico estaba bastante deteriorado, aunque es una pasada. Las esculturas y los gestos tan logrados que tienen son increíbles.
Entramos a la Iglesia que es bastante sencilla y que tiene muchas tallas del siglo XII que son muy graciosas, porque son muy pequeñitas. Las paredes están pintadas como se cree que lo estaban en la Edad Media.
Curioseando, nos enteramos que para entrar al claustro hay que hacerlo a través de la Oficina de Turismo, así que para allá nos fuimos. Pero como ya eran las 12.15h nos dijeron que o nos esperábamos a las dos o lo veíamos en 15 minutos, así que nos toco esperar. Ojo con los horarios en Francia!
Para hacer tiempo, dimos una vuelta por Moissac que no es muy bonito que digamos. Se nota que lo único importante que tiene es el Monasterio. Después de pasear un rato, decidimos ir al coche a comer.
Ya con la tripa llena, fuimos dando un rodeo al Monasterio y gracias a las placas que hay entendimos un montón de cosas! Resulta que las partes que están hechas en piedra son románicas y las de ladrillo góticas. Sin duda, si váis a Moissac hacer este recorrido, os ayudará a entender muchas cosas y es muy interesante!
Durante la época de Cluny, este monasterio fue igual de importante, pero luego durante muchos siglos estuvó medio abandonado. Hasta tal punto, que hubó una época en la que se plantearon convertir el claustro en un mercado! Y después, cuando llegó el tren, no vieron ningún problema en que se derrribará la cocina y la sala capitular para el paso del tren. Por eso, en la actualidad las vías del tren siguen dividiendo el Monasterio... increíble pero cierto.
Aprovechamos la espera, para ir a una cafetería a tomarnos un café con leche, que si que estaba bueno pero vaya pasta que costaron los dos cafés!
Y listos para ver el valioso claustro de Moissac que es románico y al que accedes y pagas la entrada desde la oficina de turismo. Nada más entrar, hay una sala con una maqueta de cómo era todo el Monasterio, una reproducción del pórtico, así como información sobre el monasterio en francés e inglés.
Este enclave, forma parte del Camino de Santiago francés, y de hecho, es un punto muy importante, si que vimos algún que otro peregrino por sus calles.
El Claustro la verdad es que es una pasada. Todos los capiteles son verdaderas obras de arte. Se van alternando, uno alude a temas biblícos y otro son motivos vegetales. Luego en cada esquina, en la parte baja, están en bajorrelieve los apóstoles y en una columna del centro, está en bajorrelieve el abad Durand, que fue bajo su mandato cuando el Monasterio tuvó más auge.
Lo que es una lástima es que estaba bastante deteriorado, pero teniendo en cuenta la historia del Monasterio, demasiado bien estaba!
Y tras disfrutar de tan bellos capiteles, decidimos dejar Moissac para ponernos rumbo a Cordes Sur Ciel que también está considerado como uno de los pueblos más bonitos de Francia.
Desde Moissac, salimos en dirección Montauban, esta ciudad (al menos por lo poco que vimos de ella) nos pareció como muy anclada en el pasado y un tanto desfasada. Al salir de esta ciudad, creíamos que tenía que salir un desvío que nos llevase hasta Cordes pero o no lo vimos o no estaba... Nos hicimos un lío y dimos bastante vuelta, pero al final, más o menos nos situamos. Aunque la verdad, es que encontramos casi de casualidad el cartel que señalaba a Cordes. La carretera que nos llevó hasta allí, pasa por un paisaje muy chulo y se veían unos pueblos preciosos.
Cordes sur Ciel está en lo alto de la montaña y la vista del pueblo segun se sube la carretera es impresionante! Aparcamos cerca de las calles que suben hacia arriba, ya que la parte histórica está en lo alto y está casi cerrada al tráfico.
Según íbamos subiendo, se iba notando que este pueblo tuvó unas casas impresionantes pero que estuvieron un poco abandonadas y que en esos momentos estaban recuperándolas, sobre todo por la presencia de artesanos y bohemios.
Lo primero que se ve al subir, es la Puerta de Ormeaux del siglo XIII, que es una de las que hay en la muralla para poder entrar en la ciudad.
Lo que más nos sorprendió, es la altura de los edificios, sobre todo porque muchos de ellos son bastante antiguos. De hecho camino del centro, pasamos por varios edificios del siglo XIII que estaban ahora rehabilitando y cuya planta baja suele ser para tiendas de alimentación o de cosas artesanales.
Antes de llegar a la Plaza del Ayuntamiento, pasamos por la Iglesia de Saint Michel que es súper alta. En la plaza hay varios restaurantes y unos edificios nobles muy bonitos.
Bajamos por la Grand rue Raimond VII por donde vimos varias casas nobles que estaban restaurando, por las pintas para hacer hoteles de lujo. Hay una casa que es impresionante... la fachada llena de figuras alegóricas de diferentes oficios medievales y las ventanas son muy elaboradas.
Este pueblo tuvó que ser impresionante en su época. Lo mejor es que la restauración que están haciendo es muy respetuosa, y aún te sientes como paseando por el medievo.
Llegamos hasta la Puerta del Horloge que aún conserva su encanto medieval y donde han puesto una puerta medieval como de los cuentos...
De vuelta al centro, volvimos callejeando sin rumbo aparente. Tiene muchísimo encanto, si bien según sales de las calles principales se ve que hay muchos edificios abandonados... sería genial ver todo el pueblo restaurado, pero es muy complicado que la gente particular pueda restaurar casonas tan grandes...
Queríamos tomarnos algo en una de las cafeterías que había en la plaza, pero para variar, allí también cerraban todo prontísimo... así que para el coche. Aunque antes nos compramos en una tienda unos mini quichés y unos pastelitos buenísmos!
Y ya para el coche, que nos esperaba un largo camino hasta nuestra cabaña. Se nos hizó bastante tarde, creemos que cogimos una ruta que daba mucho rodeo... y lo peor es que apenas nos quedaba gasolina, y por esos pueblecitos ni gasolinera ni nada. Encontramos una, pero sólo admitía pago con tarjetas pero los franceses para eso son muy suyos, y no valen las tarjetas convencionales sino sólo unas que usarán ellos... así que nada, medieo rezando para no quedarnos tirados en medio de la nada...
Cuando por fin llegamos a Gramat, qué alegría! Y ya en nuestra cabaña a descansar y cenar, y a la cama que estábamos matados!
CONTINUARÁ...
2 comentarios:
Hola, después de visitar tu página web debo felicitarte por esta y el excelente contenido que tienes.Me gustaria saber si existiria la posiblidad de enviarte un articulo 100% original, pasado por copyscape, corregido y editado profesionalmente para que puedas publicar en la seccion y dentro de este un link dado que poseo una pagina de esta tematica, y a cambio si gustas podria publicar un articulo en mi pagina tambien, sii estuvieras interesado en lo que le propongo,o si realizas otro tipo de intercambio o promocion de links, tambien estoy interesad, si es posible me encantaria que me envies un email y podramos hablar mas al detalle del tema... saludos.Espero tu respuesta.Elizabeth
Estimada Elizabeth,
En primer lugar agradecerte tus palabras, nos alegra que te guste nuestro blog, nosotros lo hacemos con todo el cariño posible.
Sobre lo del intercambio, en principio estamos abiertos a todo, si quieres danos tu mail o tu sitio web y ya lo hablamos, te parece?
Un abrazo
Publicar un comentario