16 jul 2008

II Diario de nuestro Viaje a Nápoles y Costa Amalfitana, Abril 08

Ver la 1º Parte

DIA 3:

Para hoy teníamos pensado visitar Pompeya y Herculano, así que tras desayunar, paramos en un supermercado para comprar algo con lo que hacernos allí un bocata y agua.

Para llegar a Pompeya, tomamos la "autostrada" A3, y en una media hora, llegamos a la salida que marcaba Pompeya. Cuando llegamos, dejamos el coche en un parking cercano (2,50€/h) y listos para comprar los tickets. Visitar sólo Pompeya costaba 11€ y 20€ para ver Pompeya, Herculano y tres ruinas más, así que compramos éste que nos salía mejor simplemente viendo Herculano.

Nada más entrar, ya se ven restos de edificios impresionantes. Nosotros accedimos or la Puerta Marina que era por donde se salía al mar. Lo primero que se ve, es el Templo de Apolo y el de Venus. El siguiente edificio es la Basílica que es un edificio enorme pegado al costado del Foro y su utilidad estaba vinculada a éste, ya que ahí se impartía justicia en los pleitos de carácter civil y comercial.

Así, llegamos al Foro, el verdadero centro de la vida social, económica y política de Pompeya. Está rodeado por importantes edificios administrativos, y al fondo están los edificios de la administración pública, compuestos de tres amplias salas, las salas laterales para las votaciones de los magistrados y la central donde se guardaba el tabularium o archivo de leyes.

En un lateral, que debió ser el granero, es donde tienen acumulados restos de anforas, vasijas y moldes de gente carbonizada por la erupción del Vesubio. Otro gran edificio es el Macellum, o mercado cubierto de la ciudad que se abría también al Foro. También nos llamó mucho la atención, la mesa de medición. Otra construcción muy interesante, son las Termas del foro que estaban divididas entre las masculinas y las femeninas.


Visitamos las ruinas, subiendo y bajando por distintas calles (algunas cortadas por las obras de restauración), todas bien trazadas, con grandes piedras redondeadas, con sus pasos de cebra característicos y con el ancho para que pudiesen pasar los carros. Quizás las calles no sean lo más espectacular del yacimiento, pero realmente son muy curiosas y muy bien hechas para la época.

Entre las casas más destacadas, se encuentra la "Casa del Fauno", cuyo nombre se debe a la estatua que hay en la entrada y era la casa de mayor tamaño de Pompeya. La "Casa del Poeta Trágico" es famosa por su mosaico de la entrada, que representa a un perro guardián con la inscripción "cave canem" (=cuidado con el perro). La "Casa de Pansa" que era un poderoso comerciante, ocupa toda una ínsula. También destacan, la "Casa del Horno" donde se conservan cuatro muelas de lava y algunos conductos de agua utilizados para la preparación del pan.

También pasamos cerca de la Puerta de Herculano, que era la que pasaba por la carretera que unía Pompeya con Herculano, y desde allí, visitamos la "Villa de los Misterios". Está fuera del recinto y es que era una villa en el campo, alejada del centro de la ciudad. Es muy famosa por sus frescos, gracias a los cuales se ha descubierto cómo pintaban en la época romana.

De camino hacia el centro del yacimiento, en una zona abierta al lateral de la calzada, decidimos parar a comer y descansar un rato, que visitar estas ruinas la verdad es que agota un poco, ya que son muy grandes, hacía mucho calor y en las cosas más importantes estaba hasta arriba de turistas (no nos imaginamos cómo estará esto en verano!). Y tan contentos de disfrutar de una comida tan bucólica viendo estas impresionantes ruinas, proseguimos con la visita.


Volviendo sobre nuestros pasos, pasamos de nuevo por la Puerta de Herculano para visitar algunas casas importantes que nos quedaban, como "la casa del cirujano" porque allí encontraron instrumentos quirúrgicos. La "Casa de los Vettii" que es una de las mejor decoradas, si bien estaba cerrada por restauración, aunque si que pudimos ver uno de los frescos más famosos de Pompeya, "Príapo" el dios de la fertilidad, que está justo en el lateral de la entrada y que muestra al dios, pesando en una balanza sus atributos.

Bajando hacia el Anfiteatro, visitamos el "Lupanar" que era un prostíbulo. En Pompeya se han catalogado más de 25 establecimientos de este tipo, aunque éste fue el único construido para tal fin. En la entrada de cada habitación, hay frescos con distintas posturas que eran las que se practicaban en él. El precio era de entre 2 y 8 ases (un vaso de vino en aquella época costaba 1 as).

Desde allí pasamos por el Teatro Grande, a sus espaldas está el Templo de Isis, que es un edificio de elegantes proporciones, y en el patio hay una escalinata que lleva al altar columnado en forma de templete donde había nichos para las figuras de Anubis y Harpokrotes.

De camino al Anfiteatro, pasamos por la Palestra que era un gimnasio. El Anfiteatro, está ubicado cerca de la muralla sureste y en una posición no muy céntrica para poder regular mejor la afluencia de espectadores. Tenía capacidad para unos 20.000 espectadores y su graderío estaba dividido en tres sectores: "ima cavea" para la gente importante y con gradas de mármol, y la media y summa que estaban invadidas por la vegetación. Allí se celebraban sobre todo, combates de gladiadores.

Subiendo otra vez hacia la Puerta Marina, pasamos por otra Palestra, la más grande, con forma cuadrangular y piscina en el centro. Desde allí y sorteando los numerosos grupos de turistas y escolares, llegamos hasta la salida.

Nos ha dejado alucinados! Ahí si que aprecias cómo debía ser la vida en una ciudad romana y cómo eran por dentro sus calles, casas...

Y tras sacar el coche del parking, por la autostrada en dirección a Herculano. Llegamos en 30 minutos. La zona arqueológica, está frente al mar y hay que atravesar el pueblo. Así que aparcamos el coche en un calle cercana y a visitarlo.

Herculano es un yacimiento más pequeño y menos turístico. Para llegar a las ruinas, atravesamos una pasarela y desde arriba, se pueden ver las casas enteras con dos pisos, balcones, el trazado de las calles... impresionante!

La visita es más breve ya que es más pequeño, pero cuenta con unas Termas decoradas con bonitos dibujos y divididas como siempre en masculinas y femeninas, éstas últimas más pequeñas. Un edificio destacable es el "Colegio de los Augustales" que eran unos exclavos liberados que rendían culto al emperador Augusto. También hay un gran número de casas, todas ellas conservadas de forma increíble.


No es tan turístico ni popular como Pompeya, pero es muy bonito y está menos masificado por lo que la visita es mucho más agradable.

Y cansados ya, decidimos camino de Nápoles, que al ser nuestro último allí, haríamos el esfuerzo de ir a comer una pizza en Di Matteo y una sfogliatella. Así que dejamos el coche cerca del Castillo del Ovo, y caminando por la Plaza del Plebiscito hasta la Via Toledo, donde paramos en Pintauro a comernos unas deliciosas sfogliatella. Las calles estaban muy animadas y eso que era lunes.

Qué de pizzas, casi no sabes cual elegir, pero al final nos decidimos por una Margarita de bufala DOC y por una ripiena (rellena de jamón york y champiñones), qué buenas!!!

De vuelta al coche, las calles ya estaban medio vacías, pero es que aunque parezca increíble, Nápoles también descansa. Cansados pero satisfechos, nos llevamos el mejor de los recuerdos de Nápoles, su vida alocada, su decadencia encantadora y un carácter propio díficil de definir, nosotros diríamos que toda una forma de via especial como es la napolitana...


DIA 4:

Tras levantarnos y desayunar, dijimos adiós al hotel y empezó ya nuestra andadura de nuevo. Dejamos atrás Nápoles y su caótico tráfico, y tomamos dirección ya a la Costa Amalfitana, si bien antes haríamos una parada en el Vesubio.

Para llegar al Vesubio, cogimos la subida que sale de Herculano. La carretera es un poco cutre, pero según íbamos ascendiendo y llegando al Parque Nacional del Vesubio, la carretera iba mejorando y estaba ya como más cuidada. Eso sí, no parábamos de subir y subir!

Antes de llegar al parking, había un atasco de narices, todo porque los autobuses aparcan en la carretera que no es demasiado amplia que digamos... pero bueno, al final llegamos. Por dejar el coche en el parking nos cobraron, pero vamos, muchísimo más barato que en Pompeya.

Y ya con las entradas en la mano, para arriba! Vaya frío y que aire hacía, encima al principio llovió un poco. Si bien lo peor, la cuestecita... para darnos algo! Parecía que nunca llegásemos, pero lo conseguimos.

Desde el primer sitio donde se llega, se ve el cráter más o menos y una pequeña fumarola, pero para verlo mejor decidimos rodear más el cráter. Además el camino parece mucho más tendido, la verdad es que una vez arriba, nuestro consejo es rodearlo todo porque el gran esfuerzo es subir, arriba todo es mucho más tendido, y merece la pena, al fondo hay muchas más fumarolas y las vistas son mejores. Si bien reconocemos que pensábamos que se vería algo más, pe
ro eso es sólo en las películas!

La bajada es mucho más llevadera, de hecho tenemos que ir medio frenándonos. En uno de los puestos que hay al lado del cráter, compramos una botella de vino "Las lágrimas del Vesubio", según cuenta la leyenda, el Diablo cuando se cayó del cielo, cayó en el Vesubio por eso se creo el volcán que es la entrada al infierno. Los ángeles lloraron al ver lo que pasaba, por eso el cráter se apagó y sus lágrimas son las que dieron lugar a las viñas de las que sale dicho vino... muy bonita historia.

Y tras un tentempié, de nuevo al coche con rumbo a la Costa, nuestra primera parada sería Sorrento. Vaya paisajes y vaya color tan bonito que tiene el agua!


En Sorrento aparcamos el coche al lado más o menos del centro, y a visitar la ciudad! Camino del centro ya notamos que había muchísimos turistas, debían estar todos los que echamos en falta en Nápoles.

Lo primero que hicimos por la hora fue comer, lo hicimos en un restaurante que había en la plaza principal, en la terraza. Un sitio correcto, pero más caro que Nápoles y que otros sitios.

Menuda mala suerte que tuvimos, se pusó a llover! Pero aún así visitamos las callejuelas de Sorrento, llenas de souvenirs para los turistas. Se nota que es una ciudad turística, si bien de un turismo más de lujo, vaya hoteles!

Antes de marcharnos de Sorrento, justo enfrente del coche, compramos una cafetera napolitana, toda una manera diversa de tomar el café! Y ya rumbo a la Costa Amalfitana!

Vaya carretera, si bien al principio fuimos entre prados y arbolitos, todos ellos limoneros, normal que hagan tanto limoncello. Cuando llegamos a la costa costa, nos quedamos gratamente sorprendidos, vaya montañas y todo súper verde! Eso sí, vaya curvitas y con el mar justo debajo, quien se maree... mejor con biodramina!

Camino de Praiano que era donde teníamos el hotel, pasamos al lado de Positano que está lleno de coches en la carretera, normal, tiene todas las casas colgando de la montaña! Praiano también tiene las casas medio colgando, para nuestra fortuna, el hotel estaba en llano.

Tras registranos en el Open Gate, dejamos nuestras cosas en la habitación que tenía vistas al mar y decidimos ir a Amalfi para comprarnos algo de cena. Amalfi está un poco más en llano, pero sus casas están también apretujadas. Dejamos el coche en el parking que hay en el puerto, y fuimos a buscar algo que comprarnos de cena.

Pasamos al lado de la Duomo que es impresionante. La primera impresión que tuvimos de Amalfi es que era muy acogedora y con mucho encanto...

Encontramos un súper donde compramos un par de cosillas para cenar, y para el hotel a descansar y coger fuerzas para seguir disfrutando del viaje...

13 jul 2008

Leyendas de los países visitados: Vlad Tepes - Rumania

En este post, queremos empezar a plasmar nuestro viaje a la bella Rumania. Para ello que mejor que hablar un poco de uno de sus mayores atractivos turísticos: Conde Drácula... Lo que ocurre que éste nunca existió, sino que fue toda una invención de Bram Stoker basándose en la figura del voivoda Vlad Tepes. Vaya ahí una visión de este personaje...




BIOGRAFIA:
Su traumática infancia, fue muy determinante a la hora de formar su futuro como príncipe. A los 13 años, en 1444, fue entregado a los turcos como rehén junto con su hermano Radu, por su padre como muestra de sumisión al Sultán y como garantía. Fue criado por el mismo Murat II padre de Mehmet II, el cual lo tuvo como a un hermano) en ciudades como Adrianópolis, Egniojsor, Ened y Ninfamén, siendo el propósito evitar una nueva traición por parte del padre de Vlad. Lo más seguro es que allí aprendiera de los turcos las torturas y la forma humillante de ejecución del empalamiento, que quedaría grabado en su mente para siempre.
Cuando volvió del exilio habían muerto su padre Vlad Dracul, que fue apaleado, y su hermano Mircea, que fue enterrado vivo, los dos por orden de los boyardos, a los cuales Vlad tuvo desde entonces odio eterno. Los turcos lo apoyaron hasta convertirlo en rey de Valaquia (antes incluso llegó a ser príncipe de Transilvania, pero solo durante unos meses). Esto ocurrió en 1448, pero los húngaros lo expulsaron por culpa de Juan Hunyadi, comandante en jefe de los nobles de Hungría, antiguo aliado de su padre.
Durante ocho años Vlad estuvo viajando por los lugares limítrofes de Valaquia buscando apoyo. Se sabe que en este tiempo contactó y trabó amistad con Esteban de
Moldavia
, quien le ayudaría en el futuro contra los turcos cuando éste se convirtió en voivoda de su país. Además aprendió varias tácticas político-militares.
Principado (1456-1462)
Cuando conoció que los turcos habían sido rechazados por los húngaros se lanzó al ataque del poder que ostentaba Vladislav II, protegido de los turcos. Junto con un contingente de
Transilvania derrotó al voivoda e hizo que lo ejecutaran en la plaza pública de Tirgoviste, justo donde había muerto su hermano. Una vez convertido en príncipe, en 1456
, los reinos cristianos lo reconocieron como tal.
Él fue despiadado y en las ciudades donde no lo aceptaban se realizaban ejecuciones por empalamiento de hombres, mujeres y niños, como en los casos de Kronstadt (
Brasov) y Hermannstadt (Sibiu
), ambas ciudades habitadas por colonos alemanes que no querían comerciar con él o que no querían pagarle tributo.
Con ello iniciaría su carrera de brutales masacres, entre las que se le atribuyen el exterminio de cien mil personas entre 1456 y
1462, hechos detallados en documentos y grabados de la época, que pusieron de manifiesto su gusto por la sangre y empalamiento, por lo que se le comenzó a llamar Ţepeş que significa en rumano: empalador.

Venganza contra los nobles boyardos
Una de sus acciones de empalamiento masivo fue en su venganza contra los
boyardos, asesinos de su padre y de su hermano mayor. Vlad llevó a cabo esta venganza en Pascua de 1459, invitando a los boyardos a una gran cena de Pascua pidiéndoles a estos que se pusieran sus mejores galas. Cuando terminaron de cenar, Vlad mandó empalar a los más viejos, mientras que a los jóvenes les obligó a ir hasta Târgoviste, hasta un castillo en ruinas que había en un monte cercano al río Arges. Los boyardos fueron a pie, y muchos perecieron en el camino, pero los que llegaron aún con vida, fueron obligados a construir el castillo de Dracula, y así, sus preciosas ropas de gala, quedaron convertidas en harapos, mientras, obligados a construir el castillo, iban muriendo de cansancio y agotamiento ante el deleite del Empalador, que pudo realizar su venganza y al mismo tiempo construir su castillo. Otra prueba de la gran astucia de Vlad.
A Vlad le gustaba organizar empalamientos multitudinarios con divertidas formas geométricas. La más común era una serie de anillos concéntricos de empalados alrededor de las ciudades a las que iba a atacar, pour encourager l'esprit. La altitud de la estaca indicaba el rango que la víctima había tenido en vida. Con frecuencia, Vlad los dejaba pudriéndose durante meses. Un ejército turco que pretendía invadir Rumania se volvió atrás, aterrado, cuando encontró a varios miles de empalados descomponiéndose en lo alto de sus estacas, a ambas orillas del Danubio.

Eliminación de pobres y gitanos
Otra de sus actuaciones en su reinado fue cuando la población se quejaba de los continuos robos que sufrían por parte de ladrones y asaltadores en sus territorios, además de los pobres, que según Vlad no aportaban nada al país. Para erradicar esto propuso un gran festín en una gran casa de las afueras de las ciudades para pobres, ladrones, tullidos, leprosos, enfermos, pordioseros, en donde las grandes viandas y el vino estaban por doquier. Cuando ya todos estaban bien servidos de comida y borrachos de vino, Vlad y su guardia se plantaron en la casa y preguntó a todos los allí reunidos si querían una vida sin privaciones ni preocupaciones y que todos los días se dieran festines como aquel, a lo que los mendigos y demás personas respondieron que sí y que había sido el mejor día de sus vidas. Vlad les sonrió y mandó a sus soldados que cerraran todas las puertas de la casa y prendieran fuego sobre ella. Nadie quedó con vida. Eliminó la pobreza acabando con los pobres. Estas atrocidades se fueron repitiendo con todos los mendigos en cada comarca de su principado. Llegaron a morir 3.600.
El siguiente grupo para él improductivo con el que quiso acabar, fue el de los
gitanos. Vlad reunió a los trescientos de una comarca, mandó que asaran a los tres líderes para que los demás los comieran o a cambio se alistaran al frente turco, sino todos serían asados. Los gitanos optaron por lo segundo.

Los bosques de empalados contra sus enemigos
Luchó y descargó toda su brutalidad tanto contra cristianos como contra musulmanes. Dependiendo lo que le convenía en cada momento, luchaba contra aquel que le hiciera pagar tributos. Fue traidor sádico de ambos bandos, inspiración de muchas leyendas.
Tanto musulmanes como cristianos lo tenían por maldito, quedándose él en una posición media, obligando a musulmanes de su país a luchar contra los musulmanes turcos, y a los católicos a matar ortodoxos.
El Día de San Bartolomé de
1459, Vlad hizo empalar a la mayoría de los habitantes sajones de Brasov
, una ciudad transilvana que se había rebelado contra él ya que habían apoyado al pretendiente Dan II, junto con desleales húngaros y rumanos, y a continuación organizó un festín en el centro de este nuevo Bosque de Empalados aún aullantes, frente a la tarima donde un verdugo descuartizaba lentamente a los cabecillas de la sublevación y sus familias. La peculiar celebración duró hasta muy entrada la noche, cuando, para iluminarse, Vlad y su ejército prendieron fuego a la ciudad ante los ojos de sus 30.000 agonizantes ciudadanos. Incluso a los que no mandó empalar los amontonó e hizo que sus soldados los mataran a sangre fría con espadas, picas y cuchillos. Poco después atacó a la ciudad de Tara Birsei, en donde también hubo empalamientos varios.
Al año siguiente arrasó las ciudades de Amlas y Fagaras por rebelión resultando la gran mayoría de sus habitantes empalados, quemados o muertos en combate. Estas ciudades tardaron varias generaciones en recuperar su población, quedando desiertas algunas poblaciones durante un siglo. Vlad al firmar la paz con Transilvania pidió que este principado no debería acoger a ningún enemigo y tenía que pagarle 15.000 florines.
Vlad se vio atacado en
1460
por el anterior voivoda Dan II que quería expulsarlo y recuperar el poder. Para ello se sirvió de un ejército transilvano de poco más de un millar, pero fue derrotado y capturado (sobre su muerte ver el apartado "atrocidades alegadas"). A la muerte de Dan hubo un nuevo pretendiente al principado que fue Vlad Caragarul, hermanastro de Vlad Tepes.
En 1461 derrotó al comandante turco Hanza en una emboscada en la frontera con los turcos (en las orillas del
Danubio
). Al capturar al turco le cortó los pies y las manos y lo dejó en la frontera para que sus compatriotas lo recogieran.
En 1460, 10.000 hombres fueron empalados en Sibiu. En
1461 Mehmed II, el conquistador de Constantinopla, un hombre al que no se le conocía precisamente por su repugnancia ante la efusión de sangre, se volvió a la susodicha ciudad enfermo de violentos vómitos ante la visión del Bosque de los Empalados. Este peculiar "Bosque" era un valle donde se habían talado todos los árboles para obtener estacas. Estacas suficientes para empalar a más de 23.000 prisioneros turcos, húngaros, rumanos, búlgaros y colonos alemanes y sus familias empalados allí mismo, repartidos por todo el valle, en lo alto de los palos. Éste hecho lo dejó escrito el propio Vlad ya que mandó una carta el día 11 de enero de 1462 al rey de Hungría, Matías I Corvinus, en la que escribió que había empalado a más de 20.000 personas y lo sabía bien ya que fueron cortando la cabeza a cada uno para facilitar el recuento. Además de la carta también envió al rey húngaro dos grandes sacos con orejas, narices y cabezas de sus víctimas.

Caída del poder y prisión
Pero después de 1462 los turcos se desquitaron, pues ocuparon Valaquia conquistando su capital Tirgoviste, y Vlad huyó a
Hungría para pedir protección (antes de su huida su mujer se había suicidado tirándose al río, ahora río de la Princesa, por la torre del castillo de la capital y su hijo murió durante la escapada), pero el rey de ese país lo mandó encarcelar durante doce años en el castillo de Visegrád, en la torre de Salomón. Esto ocurre tras una serie de intrigas (falsificación de documentos incluida) muy de la época y del lugar, con lo que Mehmet logra que el Rey ordenara el arresto de Vlad que fue encerrado durante doce años, primero en Visegrado (cerca de Sarajevo, a orillas del Drina) y posteriormente en las inmediaciones de Budapest, donde recibía un trato especial, es decir, era tratado con mayores consideraciones. El rey de Hungría le tenía como si fuera un visitante del castillo y ni siquiera llegó a estar entre rejas. Incluso Matías le ofreció una dama magyar, llamada Ilona Hunyadi, con la que Vlad se casó en 1467. Mientras tanto, entre 1462 y 1475, Radu, hermano menor de Vlad, hombre débil y carente de personalidad, se sentó en el trono de Valaquia casi como un títere de los turcos.
En su estancia penitenciaria hizo de encuadernador de libros y fue exhibido como atracción a las gentes que se acercaban al castillo. Mantuvo su sangriento sadismo matando aves y roedores.
Último ascenso al poder de Valaquia
Más tarde, Vlad recuperó su libertad en 1473 y su trono el 11 de diciembre de 1476, gracias al apoyo real húngaro obtenido. Su última acción fue en diciembre (se dice que fue el día 31) de
1476, cuando Vlad se lanzó a atacar a los turcos. Estos habían preparado otro gran ejército para conquistar Valaquia y poner en el poder a su voivoda, Basarab Laiota. Los turcos estaban apoyados por los nobles boyardos, quienes les dejaron vía libre para penetrar en Valaquia. Y fue Basarab quien se lanzó contra Vlad Draculea en una emboscada en la que murió éste y la mayoría de su guardia personal de moldavos, de los que sólo quedaron diez soldados. Su cabeza fue entregada a los turcos quienes la exhibieron como trofeo colgada de una estaca en el centro de Estambul
.
Aunque no se ha podido confirmar, su supuesta tumba podría estar en un pequeño convento del lago Snagov, cerca de
Bucarest
, en donde hay inscripciones y diferentes retratos sobre él.
Llegó a tener otro hijo, llamado también Vlad, con la príncesa húngara anteriormente referida (que se suicidó al no soportar la vida en el castillo de Visegrád). El hijo no llegó a gobernar y murió en
1500
.
Torturas y condenas
Aunque el empalamiento era, evidentemente, la diversión favorita de Vlad, también gozaba con la aplicación de otros métodos a quienes de un modo u otro le habían hecho enfurecer, normalmente en la intimidad de sus castillos. Entre los métodos de tortura favoritos del Príncipe de Valaquia se contaban también la amputación de miembros, narices y orejas; la extracción de ojos con ganchos al rojo; el estrangulamiento, la hoguera, la castración, el desollamiento, la exposición a los elementos o a fieras salvajes, el vaciado de ojos, la parrilla y la lenta destrucción de pechos y genitales, especialmente de las mujeres.

Anécdotas
Mensajeros turcos
A unos mensajeros turcos que se negaron a descubrirse en su presencia, Vlad los devolvió a Estambul con los turbantes clavados a los cráneos.

El comerciante
Un buen día, un comerciante florentino se presentó en su castillo para denunciar que le habían robado una bolsa de
monedas de oro. El príncipe le dijo que volviera al día siguiente. Cuando el mercader retornó al día siguiente, los ladrones y todos los miembros de sus familias estaban empalados en el patio de castillo. Frente a ellos, Vlad en su trono y la bolsa robada.
Entonces el Empalador le pidió al comerciante que contara las monedas de la bolsa, para comprobar si faltaba alguna. El aterrorizado extranjero las contó cuidadosamente, y probablemente demasiado asustado para mentir, musitó finalmente:
-Sobra una.
Vlad le contestó:
-Tu honradez te ha salvado. Si hubieras intentado quedártela, habrías acabado en la estaca más alta, junto con éstos..

Las caravanas de comerciantes
Ocurrió que unas caravanas de comerciantes alemanes en su ruta desde
Serbia hasta Hungría no llegaron a pararse en Valaquia y comerciar con Vlad. Éste, al enterarse de la falta de respeto hacia él y su pueblo, mandó capturar las caravanas y asesinar a los 600 comerciantes que las componían exceptuando a dos, a uno de ellos le sacó los ojos y a otro le cortó la lengua y les hizo volver con las cabezas de los comerciantes a Serbia.

La amante
Vlad tuvo muchas amantes a lo largo de su vida, probablemente debido al hecho de que le duraban muy poco. Un día que Vlad estaba de mal humor una de sus amantes le dijo para complacerle que estaba embarazada de él. Vlad le envió una matrona para que la examinase y cuando ésta le dijo que no había tal embarazo le rajó literalmente el vientre a su amante gritando que quería ver el fruto de sus entrañas.
Castigó duramente el adulterio y no dudó en empalar a todas aquellas mujeres que fueran acusadas de ello.

El monje empalado
Un día cuando Vlad paseaba con un monje junto a un bosque de empalados, éste le dijo que el hedor era insoportable, pero se lo dijo en tono de sorna. Vlad le miró con ojos incendiarios y ordenó que lo empalaran en el palo más alto que hubiera. Cuando el monje ya estaba empalado el príncipe le preguntó si allí arriba olía mejor.

La mujer holgazana
Vlad se encontró con un hombre trabajando en el campo que parecía falto de mujer por el aspecto de sus ropas. Al preguntarle si no estaba casado éste le dijo que sí. Drácula hizo traer a la mujer y le preguntó qué hacía en sus días, y ésta le dijo que lavar, hacer el pan y coser. Señalando a las ropas de su marido, Drácula no la creyó y decidió empalarla a pesar de que el marido afirmaba estar satisfecho con ella. Luego obligó a otra mujer a casarse con este hombre no sin antes amenazarla con el mismo destino si no cuidaba bien del campesino.
El voivoda Dan
Otra de sus acciones fue la muerte al voivoda usurpador Dan, a causa de que éste quiso derrocar a Vlad del poder de Valaquia, no sin que antes Dan cavara su propia tumba y asistiera a sus propios funerales. Ocurrió en 1460.
Los monjes mendigos
Cuando Vlad fue de visita a un pueblo de Valaquia, vio como dos monjes le pedían limosna. El príncipe les preguntó que por qué pedían limosna si podían vivir sin penurias colaborando en cualquier iglesia y éstos le respondieron que mendigando podrían saber si iban a entrar o no en el reino de los cielos, a lo que Vlad sin más miramientos, les mandó empalar y les dijo que así sus dudas quedaran resueltas de inmediato.

La copa de oro
También puso en la plaza de la capital de Valaquia, Tirgoviste, una copa de oro para que todo el mundo bebiera de ella, pero aquel que la robara se sometería a la justicia del príncipe. Durante los años de su reinado nadie osó robar la copa de oro.

Torturas a animales
Incluso cuando estaba prisionero o en el exilio, se dedicaba a torturar y mutilar pájaros y otros animales pequeños, como ratones y ardillas .

La crueldad del siglo XV
Justicia y sadismo, sangre y tortura, bosques de empalados y valentía sobrehumana. Los historiadores que defienden a Vlad III el Empalador como un héroe nacional destacan que, en aquel tiempo y lugar, el ejercicio del terror total era la única manera de mantener a raya a las fuerzas abrumadoramente superiores que, desde un lado y otro, se disputaban las puertas de Europa y de Asia. Desde esta perspectiva, Vlad Tepes habría sido simplemente un hombre de su tiempo, con la moral de su tiempo e incluso dotado de un sentido de la justicia y el patriotismo poco usual para época tan convulsa, quien hizo estrictamente lo necesario para acobardar a los masivos ejércitos extranjeros y a los desestabilizadores del interior.

8 jul 2008

Recetas de nuestros viajes IV

RUMANIA:

Nuestro último destino ha sido Rumania, y aunque el tema del idioma hacía un poco complicado el saber que comer, nuestro acercamiento a la comida rumana ha sido bastante grato e interesante. No difiere demasiado de la comida española, si bien se come más pollo y cerdo, apenas pescado o ternera, y las patatas o "cartofi" están siempre presentes. A la hora de comer, normalmente lo que comen es una sopa, una ensalada y después carne.

Ahí ponemos unas cuantas recetas de las cosas que hemos probado y más nos han gustado, si bien estamos en busca de una receta de lo que más nos gustó: los PAPANASI!!! Si alguien sabe la receta, por favor que nos la dé... mil gracias!!!!



SARMALE:

Ingredientes:
1kilo carne picada de cerdo(pavo)
100 gr de arroz
1 cebolla
hojas de col verde (previamente cocidas 2-3minutos en agua)

Elaboración:
La cebolla se corta en trocitos pequeños y se pone a freir. Añadir el arroz y seguir friendo a fuego lento,unos munutos. Se retira del fuego y se mezcla con la carne picada. Añadir una cuchara de tomate frito, sal y pimienta negra molida.
Cada hoja de cole se rellena con la carne preparada, haciéndose como una caracola bien cerrada, para que la carne no salga afuera. En una olla se ponen unas hojas de col para cubrir el fondo de la olla y se ponen los SARMALE,una al lado de otra. Se pone agua para cubrir,unas cucharas de tomate frito, laurel, pimienta nrgra en grano y se hierve a fuego lento, durante una hora y media o bien al horno,una hora.
AH MOVER LA OLLA DE VEZ EN CUANDO SOBRE EL FUEGO, PARA QUE NO SE PEGUE LA COMIDA.


CIORBÃ

1 POLLO TROZEADO
2 PIMIENTOS ROJOS
3 ZANAHORIAS
3 PAPAS MEDIANAS
2 CEBOLLITAS DE VERDEO
1 APIO Y SU RAIZ
PEREJIL (A GUSTO)
HINOJO (LAS HOJITAS, A GUSTO)
2 HUEVOS
VINAGRE O JUGO DE LIMON 2 CHORRITOS
SAL
PIMIENTA

PONER EN UNA OLLA AGUA HASTA LA MITAD O UN POCO MAS, COLOCAR LA CARNE EN ESTE CASO POLLO, CUANDO HIERVA EL AGUA SACAR LA ESPUMA Y CUANDO YA NO HACE MAS AGREGAR LAS PAPAS CORTADAS EN CUADRADITOS, LA ZANAHORIA RALLADA CHIQUITA, LOS DOS PIMIENTOS CORTADOS EN CUADRADITOS PEQUEÑOS, LA CEBOLLA DE VERDEO CORTADA CHIQUITA EL TUBERCULO DEL APIO PELARLO Y RAYARLO. PONER UN PUÑADO DE PEREJIL E HINOJO CORTADO CHICO O PICADO. CUANDO HIERVA BATIR 2 HUEVOS A PARTE E INTRODUCIRLO EN LA SOPA, PONER EL VINAGRE O EL LIMON, PROBAR SI ES QUE GUSTA MAS AMARGO O NO, PONER TAMBIEN A GUSTO SAL Y PIMIENTA......



MITITEI:

Para 4 personas
1 Kg de carne de ternera picada (puede ser mezcla de ternera y cerdo)
2 cucharadas de aceite de oliva
2 cucharadas de agua
3 dientes de ajo picados
2 cucharaditas de bicarbonato
½ cucharadita de tomillo
½ cucharadita de pimienta roja recién molida
½ cucharadita de pimentón húngaro
1 cucharadita de alcaravea
2 cucharaditas de sal
1 cucharadita de pimienta negra recién molida

Preparación:
Poner la carne picada en un bowl y añadir todos los ingredientes según el orden de la lista. Mezclar bien y amasar la carne con las manos no menos de 5 minutos, humedeciendo las manos frecuentemente. Este paso es importante porque el agua se mezcla con la carne y ayuda a mantener las mititei húmedas. Volver a poner la carne en el bol, cubrir con papel de plata y refrigerar durante 5 horas o toda una noche.
Con una cuchara, tomar cantidades semejantes de carne de la mezcla y darles forma de pequeñas salchichas del tamaño de un dedo. Cocinarlas al grill o a la barbacoa, dándoles la vuelta para que se cocinen bien por todos lados (al darles la vuelta, hay que procurar no pincharlas para que no pierdan su jugo).
Recomiendo servir las mititei con puré de patatas y acompañarlas de mostaza.
Las mititei han estado asociadas a la gastronomía rumana desde 1865. En la calle Covaci de Bucarest, existía un popular restaurante llamado La Iordachi reconocido por sus salchichas. Una noche, según cuenta la historia, la cocina se quedó sin existencias de sus famosas salchichas de ternera, por lo que mezclaron varios ingredientes sobrantes, les dieron forma de pequeñas salchichas y las asaron a la brasa. Tal fue el éxito de estas salchichas, que los clientes del establecimiento empezaron a demandar “aquellas pequeñitas sin piel” (en rumano, mititei o mici), por lo que acabaron siendo conocidas con ese nombre

7 jun 2008

Visitando Valladolid III

En este post, pretendemos continuar con la visita por Valladolid que venía del post anterior. En este caso, sería ya para después de comer.


Si se es muy goloso, tras la comida se puede ir a la Pastelería Cubero de la que ya hemos hablado para tomar un café acompañado de uno de sus deliciosos dulces, o si se prefiere ir a tomar un helado artesano a la heladería más famosa y con más prestigio de la ciudad, Heladería Manuel Iborra (C/ Lencería 2). Está en una bocacalle de la Plaza Mayor, muy buenos todos sus sabores y en invierno también venden turrones artesanos.


Y con las pilas renovadas, empezamos la visita. De la Plaza Mayor sale una de las calles más importantes de la ciudad, la Calle Santiago que es la más comercial de la ciudad (viene a ser una calle Preciados de Madrid en pequeño). Es peatonal y por ella pasean muchísimas personas, mirando escaparates, de paseo o simplemente a dejarse ver y ver a los demás (Valladolid siempre ha tenido fama de gente presumida y que se arreglaba mucho, y en parte sigue siendo así, sobre todo la gente más mayor que para ir al centro como se suele decir se ponen de domingo). En esta calle podremos ver las tiendas de las marcas de moda y edificios antiguos con hermosas fachadas. En uno de sus laterales esta el C.C de las Francesas que es curioso al tener su entrada como por la fachada de una iglesia, en la que muchas veces hay exposiciones de diversos temas.
Al fin de la Calle Santiago, se encuentra la Plaza de José Zorrilla, que para eso nació en esta ciudad este importante escritor creador del Tenorio, en la Plaza hay una estatua en su honor. Esta plaza supone adentrarse en otra visión de Valladolid, de más del siglo XIX - principios del XX con sus edificios de balcones, el amplio Paseo Zorrilla y el Parque Grande.



Enfrente del Campo Grande, se halla uno de los edificios que a María le gustan más de Valladolid, el Palacio Real, actualmente es Capitanina General. Fue construido en 1526, para el secretario del emperador Carlos V, después el Duque de Lerma compró el palacio en 1600 y luego se lo vendió al rey Carlos III. Posteriormente habitaron en él, el propio emperador y la emperatriz Isabel, así como el rey Felipe II y Santa Teresa de Jesús.


Nuestra propuesta, es entrar al Campo Grande y dar un paseo entre sus árboles, pasear al lado del lago y disfrutar un poco de ese remanso de paz y naturaleza, ya que se trata de un parque situado en el centro de Valladolid que fue creado en el siglo XVIII, según los gustos e ideas de la Ilustración. Si se va con niños, en el lago hay una barca donde se pueden dar paseos por el lago y también hay animales.


En la calle de al lado, la Acera Recoletos, a parte de poder disfrutar de algo en una terraza, suele haber casi siempre exposiciones o muestras de distintos tipos (feria del libro, ferias de artesanía...). Para los amantes de los edificios, comentar que en la esquina de Acera de Recoletos con Miguel Iscar, se encuentra la Casa Mantilla que es la primera casa que se construyó en Valladolid con electricidad, ascensores y agua corriente. Fue construida en 1891, siendo el edificio más importante del siglo XIX, ya que fue completamente innovador para su época en cuanto a materiales de construcción y decoración.

Subiendo por la Acera Recoletos, llegaremos a la Plaza de Colón, donde Valladolid rinde homenaje al descubridor que durante un época fue vecino de la localidad. Si desde ahí torcemos hacia el otro lado del Campo Grande, llegaremos al Paseo de Filipinos, donde se encuentra uno de los Museos menos valorados del país pero que si se conoce, tiene un valor incalculable y es único es su género en España: el Museo Oriental, con colecciones de arte chino, japonés y filipino reunido por los misioneros de la Orden Filipina. Si se dispone de tiempo, lo recomendamos visitar, nosotros en una visita para un día no lo incluiremos, pero en caso de dos días o más, es algo imprescindible. Al lado del Museo se encuentra la Iglesia de San Juan Letrán.

Atravesando el Campo Grande, llegaremos de nuevo a la Plaza de Zorrilla, de ahí cogiendo la calle Doctrinos, llegaremos hasta el Paseo de Isabel la Católica que es otra de las grandes arterias de la ciudad. Este Paseo se halla al lado del Pisuerga por lo que el paseo por su ribera es muy agradable, sobre todo en verano o primavera, bajo la sombra de sus árboles y el olor de sus jardínes. Recorriendo este paseo, se podrá comprobar que Valladolid si que tiene playa! La playa de las Moreras, desde donde sale el barco turístico "la leyenda del Pisuerga".

Desde ahí, conduciremos nuestros pasos hacia la Plaza del Poniente, desde donde llegaremos a la Iglesia de San Benito, cuya fachada recuerda más a primera vista un castillo medieval que una iglesia. También cuenta con un monasterio que fue fundado en el s.XIV sobre los restos de un alcázar real El Monasterio cuenta con la Hospedería con su fachada y patio, y el “Patio Herreriano” o claustro principal. La iglesia de fines del s.XV se debe y la torre pórtico de su fachada es del s.XVI. Actualmente el Patio Herreriano es sede del Museo de Arte Contemporáneo Español. Para los amantes del arte más moderno, este museo es muy recomendable.

Sin duda alguna los museos más importantes de Valladolid serían: el Patio Herreriano de arte contemporáneo, el de Escultura y el Museo Oriental. Si la visita es de más de un día, dependiendo de los gustos personales de cada uno y del tiempo disponible, sus visitas son más que recomendadas.

Volviendo a nuestra ruta, desde la Iglesia de San Benito se admira el Mercado del Val que es el típico mercado principal de todas las ciudades del siglo XIX. Si seguimos por la calle estrecha que da al Mercado del Val, veremos que hay varios sitios de tapas, recomendamos hacer un parada en el Sarmiento a degustar sus ricas tapas a base de jamón, nuestra recomendación el jabugito. Así podremos decidir dónde ir a cenar, mientras vamos abriendo apetito.

Nuestras recomendaciones para cenar son dos. Una sería cenar en el restaurante Vino Tinto que está cerca de la Plaza Mayor, donde su entrecot de buey, solomillo con queso, cecina, bacalao y tarta de queso casera recomendamos totalmente (si es fin de semana, es necesario reservar mesa). O bien coger el coche e ir a cenar a una bodega cerca de la ciudad, en ese caso recomendamos las de Fuensaldaña que son más auténticas (el precio es medio -alto). Si no se es de la zona, resulta más interesante la opción de las bodegas, ya que el restaurante es la zona baja de la bodega en un ambiente como de cueva muy curioso y donde las chuletillas de lechazo o el lechazo asado son los platos estrella y de los más recomendables.

Y para finalizar el día, un café o una copa en el Pasaje Gutierrez, que es una galería comercial construida en 1886. Cuenta con diversos elementos decorativos a lo largo del pasaje: la rejería, las pinturas del techo y las alegorías de las estaciones junto al dios del comercio, Mercurio, copia del original manierista de Juan de Bolonia. En este Pasaje hay diferentes locales donde tomar una copa o un café de forma relajada y en un ambiente agradable.

Si lo que se busca es más fiesta, hay diversas zonas, como la de Coca, Paraíso o San Miguel.


Esperamos que con esta información, se os haya abierto la curiosidad por conocer Valladolid y os sea útil. Nosotros con estos post hemos descubierto muchos datos que casi ni conocíamos! lo que suele ser normal cuando se trata de tu propia ciudad, es la que menos conoces... Para cualquier duda o comentario, consultarnos, que os intentaremos ayudar encantados.

4 jun 2008

IV Diario de nuestro Viaje a México, Jun 07

Ver los post anteriores:
1º Parte -
http://viajandoporlibre.blogspot.com/2008/03/viaje-mxico-jun-07.html
2º Parte - http://viajandoporlibre.blogspot.com/2008/03/ii-diario-de-nuestro-viaje-mxico-jun-07.html
3º Parte - http://viajandoporlibre.blogspot.com/2008/05/iii-diario-de-nuestro-viaje-mxico-jun.html



DIA 8:


Esa noche no durmimos muy bien, por el escándalo que tenían unos en el albergue, pero es que nos dió siempre la sensación de que la gente que había allí era en plan serie juvenil americana, que se van a otro país a un albergue a hacer amigos y ligar, y ni conocen la ciudad ni nada... La verdad es que nos sentó muy mal y tras desayunar, nos quejamos en recepción, y la verdad es que surgió efecto!

Mientras esperábamos en la calle del hostal a que vinieran a buscarnos para ir al Cañón del Sumidero, observamos el trajín cotidiano de la gente camino del colegio o del trabajo. Lo que nos resultó curioso, es que cada vez que pasaba un taxi nos pitaba, como para que le cogieramos... Cuando por fin, llegó la furgoneta iba hasta arriba.

Para ir al Cañón del Sumidero, hay que ir en dirección Txula Gutierrez (capital del estado de Chiapas), ahora se puede ir por autopista pero por lo que nos explicó el conductor, antes sólo había una carretera de montaña que debía ser un infierno. El paisaje del camino es una pasada, lo que nos resultó cómico es ver un toro de Osborne en una montaña...


Llegamos al embarcadero desde donde tomamos la lancha para ver el Cañón. Aquí es obligatorio ponerse el chaleco salvavidas, así que antes de ponérnoslos, los agitamos bien por si tuviesen bichos...

La lancha estaba muy bien y el que lleva la lancha es también el guía. Nos explicó que el punto más alto del Cañón tiene 1000m y según la leyenda, es desde donde se tiraron los mayas de un poblado, ya que prefirieron el suicidio antes que ser conquistados por los españoles.

El Cañón es precioso! El guía nos fue explicando la diversa fauna que había a lo largo del recorrido. Había varios tipos de aves: unas que parecían unas mini cigüeñas, otras parecidas pero un poco más grandes y negras, otras que son grises y más bonitas y que según lo que nos dijó el guía se comen los huevos de los cocodrilos, y luego una especie de pelícanos (perdón por no saber los nombres, pero somos más de letras que de ciencias...).


También vimos dos monos araña que eran muy graciosos y cocodrilos. Menos mal que el guía nos decía donde teníamos que mirar, porque entre que los cocodrilos grandes parecían maderos o estaban dentro del agua, y que los pequeños eran enanos y casi ni se les veía! También nos enseñó unos murciélagos que estaban debajo de una estalactita.

Nos explicó que el escudo de Chiapas se basa en en una parte del cañón, donde se unen como dos acantilados, en una orilla hay una palmera con un jaguar símbolo de lo indígena y en la otra un castillo símbolo de los españoles, y la unión de las dos culturas.

A lo largo del Cañón, hay varios puntos relevantes además de los anteriores, una cascada donde el musgo parece setas, una gruta donde han puesto a la Virgen de Guadalupe, un centro que están haciendo de ecoturismo y deportes de riesgo, y la presa donde está la central eléctrica. El guía nos explicó que antes de que hicieran la presa, el Cañón sólo se podía ver desde los miradores de la carretera, y que gracias a la presa se ha hecho navegable. La verdad es que nos gustó mucho el Cañón, os lo recomendamos!!!

Desde ahí, nos llevaron a Chiapa del Corzo, donde hacía muchísimo calor! Lo más importante de este pueblo es la plaza con sus soportales y en medio su templete que recuerda un poco al estilo múdejar, y el antiguo Convento de los Dominicos, que en la actualidad es un Museo del Lacado pero que justo ese día era el de descanso, así que echamos un vistazo al patio, y después descansamos un poco en la Plaza.












Al llegar a San Cristobal, pedimos al conductor que nos dejará por el centro y fuimos a comer al Tuluc. Es un restaurante poco turístico (eramos los únicos), donde compartimos una ensalada césar y luego María pidió pescado al estilo de Veracruz (picaba un poco) y Alberto un filete tuluc que era un filete de ternera relleno de queso, baicon y judías. Y de postre flan y café, muy bueno todo. Un restaurante recomendable.

Desde allí, nos fuimos directos a ver el Mercado Municipal, donde venden absolutamente de todo, sobre todo comida. Si bien llegamos a la conclusión que somos de los pocos occidentales que han ido, porque nos miraban extrañados... Lo más curioso es la mezcla de olores que hay dentro del mercado donde vendían la carne y el pescado. Antes de irnos, compramos judías para el padre de María y damos fe de que estaban ricas.

Y de vuelta para el centro, nos metimos a curiosear en una tienda que vendía remedios naturales para todo, Alberto se empeñó en comprar algo, así que compramos una pomada de veneno de abejas para el reuma y otra milagrosa que sierve un poco para todo... ahí están por casa medio perdidas. Muy curiosa y recomendable la tienda de plantas, se llama "El verberito" y está en la calle General M. Utrilla.

De camino al centro, vimos la Iglesia de Santo Domingo que es de las más importantes de la ciudad. Justo delante de esta iglesia es donde los indígenas ponen un mercadillo de artesanía. La iglesia de Santo Domingo tiene una fachada preciosa, como de color rosa y toda labrada. El interior en su época debió ser espectacular, ya que todas las paredes están cubiertas como si fueran altares, de pan de oro, pero lo chocante es que justo lo que es el altar parece como añadido y es mucho más moderno, aunque lo más importante del interior es el púlpito.

Visitamos también la Catedral por dentro, es bonita, aunque nos gustaron más las iglesias por fuera que por dentro. La Catedral en concreto tiene la fachada pintada en amarillo-ocre y rojo, y por las tardes el color es precioso.

Detrás de la Catedral, está la Iglesia de San Nicolás que es mucho más sencilla pero transmite mucha espiritualidad. Es el único edificio antiguo que no ha sido modificado de todo San Cristobal!

Y por fin, llegamos al Ticket Bus donde sacamos el billete de vuelta hacia Tulum... 16h de viaje, paciencia!!! Tras esta caminata, decidimos volvernos al hostal a descansar un rato. Para cenar, salimos de nuevo al centro y fuimos al Domino´s Pizza a comer algo un poco más occidental. Lo que nos resultó chocante es que nos dieron unos sobrecitos de ketchup, chile picante, chile seco y otro tipo de chile por si lo queríamos echar en la pizza, pero como que no. Y así tras cenar, a dormir que estábamos reventados.

CONTINUARA...